Señas demostrativas

Las señas demostrativas agrupan listas de unidades léxicas de la LESCO que regularmente aparecen modificadas en sus valores de locación y orientación con función deíctica, es decir, para señalar, en el espacio, a entidades real o imaginariamente localizadas en él, a fin de referirlas (hablar de ellas, mencionarlas). Esto puede incluir tanto señalar a un punto o hacia una dirección para ubicar allí una entidad (es decir, introducir información nueva) como hacerlo para referirse a una entidad previamente ubicada allí (reintroducir información dada).

De seguido se representará esto esquemáticamente. Supóngase que un señante quiere hablar acerca de un conejo. Si el conejo está presente, puede dirigir hacia él una seña, un INDICE (alargar la mano con el índice extendido hacia el punto en cuestión), por eiemplo, que indique a su interlocutor que quiere hablar del conejo:

esquema-conejo-1 

Si el conejo no está presente físicamente, la estrategia puede ser la misma, pero el señante deberá previamente indicar que hablará de un conejo (articulando la seña CONEJO, por ejemplo) y luego dirigir un INDICE hacia un determinado lugar, donde a partir de ese momento tanto el señante como su interlocutor supondrán presente al conejo. Para hablar de él, en las frases siguientes, no hará falta volver a señar CONEJO, sino apenas dirigir señas en esa dirección, o desde ella, para referirse al conejo. Hay un grupo particular de señas de la LESCO que sirven para tal función. Son señas capaces de modificar sus valores de LOC y de OR para señalar significativamente a puntos del espacio donde están presentes o se suponen presentes entidades sobre las cuales se quiere hablar. Esas señas son las que aquí se denominan señas demostrativas.

Se clasificará esas señas en tres grupos:

El primero de ellos, formado por  los INDICES, apunta a locaciones espaciales para mencionar a una entidad (persona, un animal, un concepto o un objeto físico) o un lugar (una institución, una población, entre otros) que se encuentra efectivamente allí o cuya existencia se pretende allí.

El segundo grupo lo constituyen los pronombres. Estos, al igual que los INDICES, señalan locaciones espaciales con función referencial, pero informan adicionalmente acerca de rasgos gramaticales de las entidades referidas (su cantidad, su persona gramatical o eventualmente su función en la oración).

El tercer grupo está formado por los verbos unidireccionales y  los verbos bidireccionales. Se trata de señas con sentido básico predicativo o verbal, que pueden modificarse para apuntar a locaciones en las cuales se encuentran o se pretenden ubicadas ciertas entidades o lugares. El significado base de la seña asigna a tales entidades roles gramaticales específicos (si se deben entender como sujetos, objetos, fuentes o destinos de las acciones o estados sobre los cuales la seña informa). La diferencia entre unos y otros radica en que mientras los unidireccionales refieren, significativamente, a una única locación, correspondiente a su unidad temporal final (donde se encuentra bien su sujeto o bien su objeto, por ejemplo), los bidireccionales pueden referir, significativamente, a dos locaciones, en sus unidades temporales iniciales y finales, donde se encuentran respectivamente sus sujetos y sus objetos, por ejemplo.

En esta sección se va a presentar cada uno de esos tipos.